La ley se justifica por la necesidad de proteger los conocimientos colectivos, que no pueden ser adecuadamente defendidos por los mecanismos tradicionales de propiedad intelectual, como patentes o derechos de autor. Estos conocimientos son considerados como parte del patrimonio cultural indígena y se desarrollan de generación en generación, lo que resalta la importancia de un enfoque que respete la colectividad y el intercambio.
Los principales objetivos de la Ley 27811 incluyen:
- Promover el respeto y la preservación de los conocimientos colectivos indígenas.
- Asegurar el consentimiento fundamentado previo para el uso de estos conocimientos.
- Fomentar el desarrollo de mecanismos que permitan compartir los beneficios generados por el uso de estos conocimientos.
- Proteger contra la biopiratería, es decir, el uso no autorizado de estos conocimientos.
Protección de los conocimientos
La ley protege conocimientos que pertenecen a los pueblos indígenas y no a individuos específicos. Esto incluye conocimientos sobre la biodiversidad y sus usos. La autorización para el uso de estos conocimientos debe ser otorgada por las organizaciones representativas de los pueblos indígenas.
Mecanismos de protección
Los conocimientos colectivos pueden ser protegidos a través de:
- Contratos: Necesarios para el acceso y uso comercial de conocimientos que aún están bajo control indígena.
- Secretos: Protegen los conocimientos que no deben ser revelados sin consentimiento.
- Registros: Existen registros públicos y confidenciales administrados por INDECOPI, que ayudan a documentar y proteger los conocimientos.
Derechos y beneficios
La ley otorga a los pueblos indígenas el derecho a iniciar acciones legales si sus conocimientos son utilizados sin autorización. Además, establece que un porcentaje de las ventas derivadas del uso de estos conocimientos debe destinarse al Fondo para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, que apoya proyectos de desarrollo integral en estas comunidades.
La Ley 27811 busca crear un marco legal que respete y proteja los conocimientos colectivos de los pueblos indígenas, promoviendo su desarrollo y asegurando que se beneficien de su uso en el contexto moderno.